Ataque terrorista de Pahalgam: vivir bajo la amenaza constante de hostilidades renovadas, los aldeanos que residen cerca de la frontera internacional (IB) y la línea de control (LOC) en Jammu se están preparando una vez más para lo peor. A raíz del ataque terrorista de la Pahalgama y la escalada posterior entre India y Pakistán, los residentes han comenzado a limpiar los bunkers subterráneos y prepararse para cualquier posible brote.
El gobierno ha construido miles de refugios seguros subterráneos a lo largo de los años para proteger a los civiles de los disparos transfronterizos. Aunque las violaciones de alto el fuego se han mantenido relativamente bajas desde 2021, las secuelas del reciente ataque de Pahalgam han provocado nuevas preocupaciones de seguridad entre los habitantes fronterizos.
Un video publicado en la plataforma de redes sociales X muestra a los residentes en bunkers comunitarios de barrido y limpieza de Jammu, dando pasos de precaución en caso de que las tensiones se intensifiquen aún más.
India comparte una frontera de 3.323 kilómetros de largo con Pakistán, de los cuales 221 km de la frontera internacional (IB) y 744 km de la Línea de Control (LOC) caen en Jammu y Cachemira. Para los aldeanos que viven a lo largo de estos volátiles estiramientos, el miedo al bombardeo transfronterizo sigue siendo una realidad sombría.
El ataque terrorista contra turistas en el South Cachemira Pahalgam Hill Resort el 22 de abril dejó 26 personas muertas, en su mayoría turistas, provocando indignación a nivel nacional. El primer ministro Narendra Modi, reaccionando fuertemente al ataque, dijo: “Los asesinos serían perseguidos hasta los fines de la tierra” y prometieron “identificar, rastrear y castigar a todos los terroristas y sus patrocinadores”.
En vista de los vínculos transfronterizos con el ataque, el gobierno indio anunció el miércoles una serie de medidas punitivas. Estos incluyen la suspensión del Tratado de las Aguas Indus de 65 años, el cierre del cruce de la tierra de la tierra de Attari y la expulsión de los militares paquistaníes. Nueva Delhi también ordenó que todos los ciudadanos paquistaníes que ingresaron a través de la frontera terrestre de Attari deben irse antes del 1 de mayo.
En respuesta, Pakistán anunció el jueves que cerraba su espacio aéreo a todas las aerolíneas indias y suspendía el comercio con India, incluido el comercio enrutado a través de terceros países. Pakistán también rechazó la suspensión de la India del Tratado de las Aguas del Indo, advirtiendo que cualquier medida para detener el flujo de la mayor parte del agua de Pakistán se trataría como un “acto de guerra”.
A medida que los lazos diplomáticos continúan empeorando, los residentes a lo largo de la frontera de Jammu se preparan silenciosamente, viviendo con la esperanza y el temor de que la paz se mantenga, pero se prepara para la posibilidad de que no lo sea.